Independientemente de la estructura, todas las coaliciones comparten valores comunes que destacan la importancia de
- proporcionar una voz estatal en nombre de las víctimas,
- apoyar el trabajo de los programas miembro locales,
- responsabilizar a los sistemas sociales por sus respuestas a las víctimas y
- trabajar en la prevención de la violencia.
El alcance del trabajo de las coaliciones estatales contra la violencia sexual y la violencia doméstica es intencionalmente amplio para proporcionar un liderazgo que integre los programas, leyes y políticas locales, estatales y nacionales.
Las coaliciones proporcionan un puente crítico entre el trabajo de los intercesores locales que brindan servicios directos, los responsables de la formulación de políticas en todo el estado y las respuestas federales a la violencia contra las mujeres. A través de membresías en todo el estado y la convocatoria regular de reuniones con los miembros de los programas, las coaliciones pueden comunicar los desafíos y los éxitos del trabajo local a nivel nacional, y transmitir las mejores prácticas que surgen a nivel nacional a los programas de miembros locales.
Las coaliciones no son homogéneas. Hay tantos tipos de coaliciones como existen coaliciones ya formadas. Cada estado o territorio tiene necesidades, comunidades y oportunidades únicas que dan forma al trabajo y la estructura de cada coalición.
En algunos estados, hay una sola coalición que se ocupa de ambos los temas de violencia doméstica y violencia sexual, mientras que en otros hay dos coaliciones que se enfocan en cada uno de estos temas. La mayoría de las coaliciones no proporcionan servicios directos a las víctimas, algunas proporcionan unos cuantos servicios y otras son también proveedores de servicios en su zona. Las coaliciones pueden ser en estados rurales o urbanos, con un personal de 25 o un sólo empleado, con un presupuesto de millones o solo cien mil dólares.
La financiación específica para coaliciones está disponible a nivel federal a través de la Oficina sobre la Violencia contra la Mujer (coaliciones contra la agresión sexual y violencia doméstica) y el Departamento de Salud y Servicios Humanos (coaliciones contra la violencia doméstica). Además de estas fuentes de financiamiento, las coaliciones pueden solicitar una variedad de subvenciones federales, fondos estatales, donaciones de fundaciones privadas y, a menudo, recibir cuotas de membresía y donaciones individuales. Para ver el resumen más reciente de estos datos, consulta las encuestas que el RSP hizo a las coaliciones.
Históricamente, las coaliciones se formaron como federaciones comerciales de base. Por ende, un componente central de una coalición estatal es, a menudo, su membresía y muchas mantienen ese enfoque. Este aspecto de una coalición lo distingue de otras organizaciones sin fines de lucro. Al inicio, la mayoría de las juntas de las coaliciones se formaron al igual que todas las juntas directivas de membresía, variando en tamaño, composición y dirección. Actualmente, vemos una variedad de composiciones de juntas directivas, que pueden incluir cualquiera de las siguientes mencionadas a continuación:
- Representación de programas miembro
- Representación regional
- Representación de sobrevivientes
- Representación diversa
- Representación de la comunidad en general
- Representación de grupos de trabajo o asambleas organizadas
Algunas coaliciones aún mantienen juntas directivas compuestas únicamente por sus centros miembros. Otras coaliciones han reestructurado la junta para designar puestos que incluyan tanto a representantes de los programas miembros como a integrantes de la comunidad con habilidades específicas o profesionales aliados o juntas directivas comunitarias. El reclutamiento de integrantes de juntas directivas externos al movimiento para acabar con la violencia contra la mujer ha ayudado a algunas coaliciones a establecer nuevas relaciones con colaboradores en los sistemas y fuentes de ingresos alternativas, así como a reforzar la dirección organizacional.
Existen beneficios en cada estilo de composición de juntas directivas y las coaliciones eligieron y evolucionaron sus juntas y estatutos en función de las necesidades únicas de su agencia, membresía y comunidad.
En general, las coaliciones se forman y evolucionan en respuesta a una necesidad de la comunidad y estas necesidades son individuales y específicas de cada estado y territorio.
Incluso con estructuras de membresía, personal y juntas directivas muy diferentes, las coaliciones estatales y territoriales tienen algunos aspectos en común, que incluyen:
- Un público principal compuesto de programas privados, comunitarios y sin fines de lucro;
- Compromiso de proporcionar una variedad de servicios a estos programas;
- Participación de estos programas en el desarrollo de los servicios de la coalición y rendición de cuentas a estos programas;
- Impulsado por sobrevivientes.