Cómo establecer una compenetración con los legisladores: planificación, persistencia y persuasión con educación
por Elizabeth Barnhill, directora ejecutiva, IowaCASA
Este artículo se publicó originalmente en ReShape, volumen #5, marzo 2002
Quedé totalmente sorprendida el primer año que trabajé para la coalición y traté de abogar en pro de nuestros asuntos de interés. Creía que estos temas generarían apoyo o rechazo con base en su propio mérito. Contábamos con argumentos esmeradamente razonados y, por supuesto, estábamos trabajando a favor de las víctimas de violación. Pensé: ¿quién podría oponerse a nosotros? Luego escuché cómo la Legislatura de Iowa estaba debatiendo ferozmente el “TDI” (trastorno disociativo de la identidad) y aprendí que cualquier enfermedad porcina obviamente era un tema más importante que cualquier trastorno disociativo y me di cuenta de que todo esto era más difícil de lo que había pensado.
Después vi que la curva de aprendizaje era incluso más empinada. Las inteligentes y capaces intercesoras con quienes había trabajado, mujeres con la destreza de desafiar a un oficial de policía insensible, a un juez indiferente o a un agresor manipulador… daba por hecho que esas mujeres no tendrían ningún problema hablando con legisladores engreídos ¿verdad? “Por eso te contratamos”, dijo una directora veterana, cuando la llamé para hablar de las estrategias que habíamos empleado en el pasado en torno a esos temas. Aprendí que incluso varios de los intercesores más experimentados se sentían incómodos hablando con los legisladores.
Sin embargo, de esto surgió una exitosa red de trabajo sobre las políticas públicas. IowaCASA, junto con la Coalición contra la violencia doméstica en Iowa (ICADV), había intentado por varios años lograr que se eliminara la excepción de violación conyugal del código legal de Iowa. Durante esos esfuerzos, las coaliciones cometieron un error estratégico al enviar postales con la frase: “En Iowa, una licencia matrimonial es una licencia para violar”. Aparentemente con esto, pisoteamos la santidad del matrimonio y los legisladores enloquecieron. (Yo pensaba que había sido una buena idea en ese momento, pero así es la realidad en la política). Las dos coaliciones realizaron una serie de seminarios en varios distritos clave alrededor del estado. Los seminarios incluyeron información acerca de la violencia doméstica, la agresión sexual y testimonios de víctimas de violación conyugal. Voceros de la oficina de la coalición se unieron con voceros de los programas locales contra la agresión sexual y la violencia doméstica. Estas estrategias de hacer talleres en distritos selectos con legisladores clave, convocar a ponentes externos, representantes locales y sobrevivientes del delito, con el tiempo, fueron exitosas.
IowaCASA también había iniciado otro exitoso esfuerzo para establecer redes legislativas: la formación de un grupo de trabajo en torno a la explotación sexual por parte de consejeros (orientadores) y terapeutas. El grupo, que hizo una encuesta informal sobre el problema, contaba con representantes de la mayoría de las disciplinas de la salud mental, además de varios legisladores amistosos, incluyendo uno que, más tarde, aceptó ser
el patrocinante del proyecto de ley. Esa estrategia de involucrar a la potencial oposición, recopilar datos e incluir a los legisladores clave en la creación del proyecto de ley también rindió frutos con el tiempo.
Contábamos con los elementos de una exitosa red legislativa, pero lo único que nos faltaba era determinar cómo: 1. organizar a intercesores sumamente ocupados, cuya prioridad (con razón) es responder ante las crisis, no los temas ilógicos y tediosos de la legislatura, 2. capacitar a las personas que se sentían intimidadas de comunicarse con los legisladores y 3. comunicarnos exitosamente con legisladores atareados y generalmente no muy bien informados que, a menudo, tenían otras prioridades.
1. ¿Cómo organizamos a intercesores ocupados en un grupo eficaz de políticas públicas?
Nuestros esfuerzos anteriores involucraban hojas informativas y cadenas telefónicas. Las hojas informativas sí fueron herramientas útiles, tanto para los intercesores como para los legisladores. Un formato que me pareció útil (prestado de otra coalición cuyo nombre se me olvida, ¡pero gracias!) es una página con la siguiente información:
- Breve descripción del problema
- Antecedentes: legislativos u otro historial relevante
- Solución legislativa
- Información de contacto: información sobre la coalición y el cabildero
- Para los intercesores, incluyo Acción necesaria: números telefónicos de la Cámara baja y el Senado y qué información mencionar.
Aunque es posible que los legisladores patrocinantes y algunos intercesores necesiten más información, como regla general, ningún grupo cuenta con más tiempo para digerir más que estos datos.
Las cadenas de llamada son menos eficaces, por lo menos si se utilizan por sí solas. Frecuentemente, el resultado que se generaba era como el del juego infantil del “Teléfono”, en el cual la información se distorsionaba cada vez más a medida que se transmitía una y otra vez. Luego de iniciar una cadena de llamadas, una intercesora terminó llamándome a MÍ para que asegurara la aprobación de un proyecto de ley sobre financiación. . .
Una estrategia más eficaz, entonces, parece ser: una distribución inicial del paquete de información sobre el proyecto de ley, seguido de un email cuando surja un tema que requiera atención y DESPUÉS, llamadas de recordatorio. Los miembros de la coalición, con el tiempo y la práctica, se han vuelto bastante eficaces en hacer llamadas al último minuto cuando es necesario que un proyecto de ley avance al siguiente paso en un comité o si se está debatiendo. Una lluvia de llamadas, de centros en todo el estado, puede lucir como una enorme oleada de apoyo y puede ser muy efectivo. Invitamos a los miembros a que llamen a la oficina de la coalición si hay preguntas que no pueden responder o si reciben una respuesta no muy amistosa de parte de un legislador en particular. En esos casos, le pedimos al personal de la coalición o a nuestro cabildero que dé una respuesta.
2. ¿Cómo capacitar a los intercesores sobre temas legislativos y de política pública?
Además de distribuir nuestro paquete de información legislativa, dedicamos tiempo en la coalición a conversar los temas por venir y abrimos un espacio para preguntas de la membresía. Durante nuestra sesión legislativa (la cual dura alrededor de 5 meses en Iowa), organizamos nuestras reuniones de modo que los miembros tengan tiempo en la tarde de reunirse con los legisladores. Esto les da a los miembros menos experimentados la oportunidad de acompañar y observar a otros. También ponemos nuestro cabildero a disposición para ayudar a la membresía. Nuestro día de acción política, el cual se organiza en conjunto con la Coalición contra la violencia doméstica en Iowa, también es una oportunidad para que los nuevos intercesores, voluntarios e integrantes de la junta directiva de los centros tengan la experiencia de reunirse con los legisladores.
También hemos alentado a la membresía a que invite a legisladores a sus programas para hacer un recorrido y sesiones de escucha, sobre todo cuando están fuera de la sesión legislativa. Esto les da la oportunidad de reunirse con los legisladores en su propio terreno, en un espacio menos intimidante y realmente hablar acerca de los temas que afectan a su trabajo.
Después de la sesión legislativa, nuestra directora legislativa imparte una capacitación muy útil sobre cualquier cambio a las leyes. Ella revisa los cambios, detalla el texto específico y explica todo. Posteriormente, la membresía se divide en grupos pequeños y a cada grupo se le asigna uno de los cambios legislativos. Se les pide que examinen el cambio y formulen una explicación sencilla, además de preguntas que sientan que podrían surgir en sus comunidades. Los grupos pequeños luego presentan esta información ante el resto de sus compañeros de la membresía. Este ejercicio les da a los intercesores la oportunidad de familiarizarse con nuevas leyes antes de que trabajen con estas en sus propias comunidades. (Ejercicio cortesía de Sue Prochazka en Keokuk, Iowa).
3. ¿Cómo comunicarse con legisladores atareados?
Hemos trabajado con la Coalición contra la violencia doméstica durante los últimos años y hemos encuestado a los legisladores en cuanto a temas de violencia contra las mujeres. Aunque no recibimos de vuelta todas las encuestas, esto destaca el perfil de los temas en los ojos de los legisladores.
También enviamos nuestras prioridades legislativas y les pedimos a los miembros de la coalición que hablen de los temas en las reuniones públicas o sesiones de preguntas que la mayoría de los legisladores realizan en sus distritos. Esto vuelve a resaltar el perfil de los temas y proporciona un espacio para el debate en una atmósfera menos volátil y apurada que en el Capitolio.
Las hojas de datos breves y específicas parecen ser las más útiles para los legisladores. Por ejemplo, en el momento que se escribió este artículo estábamos tratando de recoger información sobre el efecto de los recortes presupuestarios sobre los programas. Les pedimos a los centros que nos digan cómo los recortes de personal afectarán a la cantidad de víctimas que podrán acudir a los grupos de apoyo, cómo la reducción de fondos los obligará a retirar servicios en ciertos condados, etc.
Lograr que los legisladores escuchen de parte de un sobreviviente que esté dispuesto a hablar ha sido algo sumamente eficaz. Cuando recibimos llamadas de sobrevivientes frustrados por una ley estatutaria o procedimiento, les preguntamos si están dispuestos a hablar con los legisladores. (Por supuesto, también les brindamos referencias si necesitan intercesoría u otro tipo de ayuda. Sin embargo, los sobrevivientes que se comunican con la coalición frecuentemente están más interesados en generar cambios.) Mantenemos esos nombres durante varios años a veces y nos comunicamos con ellos
cuando haya un tema de interés que surja ante la legislatura.
Una vez que la legislatura entra en sesión, les pedimos a los interesados en el tema que sigan comunicándose de la manera que explicamos anteriormente y de estar en contacto con sus legisladores durante los fines de semana. Muchos de los legisladores aquí organizan desayunos sabatinos durante la sesión: esto brinda una buena oportunidad para hacer preguntas y proporcionar información a medida que avanza la sesión legislativa.
Por supuesto, también trabajamos en colaboración con una cantidad de grupos que se enfocan en temas que afectan a las mujeres, a las víctimas de delincuencia, la salud mental, las comunidades de color, comunidades inmigrantes y de refugiados, comunidades LGBTQ, servicios humanos, jóvenes, comunidades de fe y otros. A menudo apoyamos y promovemos nuestras prioridades legislativas mutuamente, lo cual aumenta la divulgación de los temas y amplía nuestra fuerza de cabildeo. Los intercesores frecuentemente llevan nuestras prioridades legislativas a otros grupos en los que están activos. Cuando las plataformas de los partidos se redactan, proporcionamos declaraciones a los intercesores y les pedimos que vayan a sus respectivos grupos de votantes para solicitar que esos temas se envíen ante los comités estatales de los partidos que elaboran las plataformas.
Así que… siempre programamos nuestros días de acción política para no coincidir con los cabilderos de la industria bovina y porcina, pero hemos progresado significativamente en comunicarnos de manera efectiva. Sin embargo, estoy segura de que muchos aún piensan que el TDI es una enfermedad que afecta a los porcinos…