Los sobrevivientes necesitan un lugar seguro para llevar adelante el trabajo emocional de su recuperación. Los asesores parten desde donde se encuentre el sobreviviente. El asesor juega un papel esencial al ayudar a los sobrevivientes a buscar entre las opciones de vivienda y recobrar el sentido de seguridad. Hasta tiempo reciente, el campo de trabajo anti-violación no había considerado los temas de refugio y vivienda como cuestiones vinculadas con la violencia sexual. Cuando se piensa y se escribe acerca de la crisis de violencia sexual y nuestras respuestas, generalmente se piensa en las necesidades médicas, los temas legales y el apoyo emocional. Como movimiento, frecuentemente se subestiman las necesidades de vivienda y refugio que manifiestan los sobrevivientes de violencia sexual. Rara vez se les pregunta a los sobrevivientes respecto a sus inquietudes sobre la vivienda. La sanación ante la violencia sexual sólo puede ocurrir sobre una base de seguridad y ésta comienza en el hogar.